Los gremios petroleros de la Patagonia se encontraron ayer con una previsible resistencia de parte de las empresas a su pedido de un bono de 50.000 pesos a pagar en cuatro meses. Las negociaciones, que ayer contaron con el arbitrio del Ministerio de Trabajo, se pasaron para mañana en Buenos Aires.
«El pedido es importante, no se trata de un monto chico. Pero la erosión en el salario se nota y tenemos que llegar a las paritarias en marzo», expresó anoche el titular del sindicato de Jerárquicos, Manuel Arévalo.
«Río Negro» intentó comunicarse con el senador y titular de Petroleros, Guillermo Pereyra, pero este no respondió a los llamados.
Fuentes al tanto de la negociación, revelaron que el diálogo se dio en buen tono, pero que existe una resistencia de las empresas a afrontar ese pago. El gobierno, aunque sólo oficie de mediador, también intenta moderar las expectativas para evitar un efecto cascada en otros sectores.
El encuentro arrancó con demoras y recién pasadas las 16 pudieron sentarse a la mesa, representantes de la cámara de empresas petroleras y los titulares de los sindicatos de la industria. Contó con la presencia de la secretaria de Trabajo, Noemí Rial, quien atendió el posicionamiento de la partes.
Allí los petroleros llevaron sus pretensiones: una suma no remunerativa de 50.000 pesos a pagar en cuatro meses. En diciembre, como compensación de Ganancias, y de enero a marzo, como «acuerdo puente» a la espera de la nueva negociación salarial.
La charla no fue sencilla, contaron a «Río Negro» fuentes de la negociación, al señalar que las conversaciones en paralelo y las consultas constantes ralentizaron lo que en la previa parecía más sencillo.
Del encuentro participaron además los secretarios generales de los sindicatos de Petróleo y Gas Privado de Santa Cruz, Claudio Vidal, y de Chubut, Jorge Ávila. También estuvieron los titulares de los jerárquicos de Patagonia Austral, José Lludgar y, de Cuyo, Julián Matamala. También los jerárquicos de Neuquén, Río Negro y La Pampa, estuvieron presentes.
Los petroleros venían de bajar un paro votado a fines de octubre en Comodoro Rivadavia, cuando el reclamo por Ganancias fue el eje de la convocatoria. Tras las mesa tripartita propuesta por nación, dejaron sin efecto la medida con la que amenazaron paralizar más de 55.000 operarios.
Fuente: Diario Río Negro