Titulares

Abuela de nena violada quiere en la cárcel a su hija

La niña quedó embarazada y tuvo que abortar. Un ADN reveló que fue abusada por su padrastro.

CIPOLLETTICIPOLLETTI | La familia de la niña de 11 años que quedó embarazada tras reiterados abusos fue notificada de que el padre es la pareja de la madre. Frente a la novedad, la abuela salió a reclamar su inmediata detención y la de su propia hija porque la considera cómplice de los sometimientos sexuales. “Que mi hija también vaya adentro como ese sinvergüenza”, pidió Nelly Retamal. 

La víctima de los ataques sexuales se recupera de un aborto practicado en el hospital de Cipolletti a principios de julio. Debido a su delicado estado de salud y por las circunstancias del hecho, los médicos realizaron una urgente intervención quirúrgica con conocimiento de la justicia y bajo el amparo de la Ley 4796.

También la menor tuvo que pasar por la cámara Gesell para relatar las circunstancias de los abusos y, en un primer momento, apuntó que su embarazo fue producto de una relación de noviazgo con un adolescente del barrio Pichi Nahuel. Sin embargo, había varias sospechas de sometimientos sexuales en su propia casa, y no sólo su abuela Nelly, sino también  su hermana más chica le reclamaron que cuente la verdad. “El pibe de la plaza nunca existió”, precisó Nelly, quien está decidida a llegar hasta las últimas consecuencias.

La investigación por la violación de la niña se abrió a partir de su embarazo y la atención recibida en el hospital cipoleño. Una de las primeras medidas fue ordenar un ADN del feto y del principal sospechoso de los abusos: el padrastro. Después, se decidió ampliar el trabajo judicial en relación al presunto padre de la criatura y se requirió un análisis genético del hijo del sospechoso. Los informes del Laboratorio Forense de San Carlos de Bariloche fueron contundentes: “un 99,99 de probabilidad de vínculo biológico y paternidad de D.I. con respecto al feto”.

Todo esto fue descripto a Nelly ayer por la mañana en el edificio judicial de España y Urquiza. Asimismo, se le solicitó prudencia y hermetismo en cuanto a hacer públicos los resultados científicos pero la vecina del Mapu quiere justicia y ver en la cárcel al padrastro de su nieta y a su hija: “Yo a mi hija la hago tan culpable como a él”.

Sin apoyo psicológico 

En este marco, un capítulo aparte merecen oficinas judiciales como la de Atención a la Víctima o los defensores de Menores. Molesta, Nelly aseguró: “Me hicieron llenar un montón de formularios para el psicólogo, asistente social y la nena todavía no fue atendida por nadie. Me da bronca porque nadie viene a la casa y acá cualquiera los puede atender”.

Sin pelos en la lengua y decidida a luchar por su familia, principalmente por los más pequeños, Nelly remarcó que quiere la tenencia de todas sus nietas y que interrumpió todo el diálogo con su hija. Recordó que en los últimos años hizo un gran esfuerzo para que abandone al hombre sospechado de los abusos pero la mujer prefirió seguir a su lado. Y reconoció que tuvo el presentimiento de que algo irregular estaba pasando: “Son tres hermanas y ella siempre se quedaba en la chacra (lugar donde vivía con la madre y su padrastro). Y yo le dije a mi hija: ‘Ojo’”.

La causa penal abierta por los sometimientos de la niña está caratulada como abuso sexual con acceso carnal. Luego de conocerse el resultado del ADN, se espera la indagatoria del principal sospechoso, quien tendría antecedentes por delitos similares.

A pesar de su trabajo diario, Nelly enfatizó que no se detendrá hasta que “se haga justicia” y se condene a los involucrados.

 

Fuente: LMC

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