El club recuperó la subcomisión justo antes de la fecha del TC.
Casi dos décadas después de haber perdido a su subcomisión de automovilismo, el Club Cipolletti vuelve a salir al ruido de los fierros con su flamante grupo de trabajo encabezado por Walter Casquero.
Ayer, en el playón de estacionamiento que tiene la tienda 1926 en Yrigoyen y Mengelle se dispuso de un acto de presentación con la presencia de Alicia Reina, Juan María Nimo, Félix Mabellini, y Pablo Busín también se terminó sumando al contacto con los vecinos. La actividad fue la previa ideal de la carrera del TC en Centenario para los fanáticos del mundo tuerca.
La intención fue dar a conocer la aparición de esta nueva propuesta que comenzó a tomar forma bajo la presidencia de Luis Stefoni en el club y que se terminó cristalizando ahora bajo la tutela de Santiago Caldiero.
En carpeta existe la intención de recuperar las viejas peñas automovilísticas y lanzar para después de mitad de año una prueba de regularidad para festejar los 90 años de la institución.
«Nos propusimos una aparición más social a partir de los autos, no involucrarnos todavía con la parte de velocidad», explicó el titular de la subcomisión. Pese a ello, hay tratativas para cobijar al predio del kartódromo.
Todos los autos
El abandono de la actividad por parte del Club Cipolletti le costó perder el espacio destinado al autódromo. «Eso ya fue», explicó Casquero como un nuevo punto de partida.
Y en señal del espíritu de unión que perseguirá durante su gestión, el público pudo ver y fotografiarse con la camioneta de Reina, finalista del Dakar 2016, el Bora con que el Gatito Nimo correrá el fin de semana en Centenario y el Chevrolet de promoción de Guillermo Ortelli, animador constante del Turismo Carretera que también se sumó al acto por intermedio de la gente de prensa de la ACTC, que está recorriendo todo el Alto Valle a pocos días del inicio de la fecha de la máxima categoría del automovilismo nacional en el Alto Valle. Aunque muchos tenían la expectativa de ver a alguno de los pilotos nacionales, los flashes fueron todos para las máquinas.