Por las graves heridas sufridas, la joven falleció. La mujer circulaba por un sector de la Ruta 6 en Rincón.
Rincón de los Sauces | Una joven de 20 años fue atropellada por un camión de mediano porte, en un sector de la Ruta provincial 6 que es masivamente utilizado por deportistas que se ejercitan a diario.
La mujer, identificada como Brenda Arenas, conducía su bicicleta hacia Rincón desde el sector conocido como La Difunta Correa, cerca de las 20 del lunes y a escasos seis kilómetros del centro de la ciudad, cuando un camión de la empresa M y M, la embistió de atrás.
El rodado mayor era conducido un joven de 21 años, quien no se detuvo al momento del brutal impacto, dejando a la muchacha al borde de la muerte y abandonada en medio de la oscura ruta.
Durante algunos minutos, Brenda estuvo tirada en medio del cemento sin que nadie la auxiliara, hasta que un operario petrolero pasó con su camioneta junto a ella y logró divisar un bulto en medio de la ruta.
El hombre retrocedió para identificar aquello que estaba tirado para descubrir que se trataba de una persona inconsciente con múltiples golpes y fracturas.
Inmediatamente, el petrolero llamó al hospital y a la policía, los que rápidamente llegaron al sitio.
La joven apenas respiraba y fue llevada a la sala de emergencia de la Clínica de Petroleros Privados.
Sin embargo y después de intentar sacarla de un paro cardiorespiratorio y en medio de un grueso operativo para disponer su traslado a Neuquén, Brenda falleció por la gravedad de sus heridas, principalmente en la zona craneana.
A los pocos minutos, una persona se presentó en la unidad policial 35 asegurando ser el autor del hecho.
Según informó ayer el subcomisario Julio Arraín a la radio local Estación Urbana, «éste joven llegó a la comisaría y en medio de un evidente ataque de nervios aseguró ser quien atropelló a la mujer», sostuvo.
El joven consciente de lo ocurrido y minutos antes de ingresar a la comisaría, llamó por teléfono a su padre para relatarle lo ocurrido, quien le habría ordenado que se entregara a la policía inmediatamente.
Las primeras informaciones aseguraban que el conductor no tendría alcohol en sangre por lo que luego de los trámites de rigor y con una carátula de homicidio culposo en situación de accidente de tránsito, recuperó su libertad.
Mientras todo esto ocurría en la comisaría, un drama familiar de dolor e impotencia, embargó a los familiares de Brenda.
Según se supo, al momento del accidente la chica tenía puesta ropa oscura y circulaba por la cinta asfáltica sin ningún elemento refractario, cuadro que también forma parte de la investigación como así también la velocidad del camión al momento del impacto y la deteriorada ruta, donde decenas de pozos de uno y hasta dos metros de longitud, cruzan los carriles obligando a quienes utilizan el camino, a zigzaguear peligrosamente.