RINCÓN DE LOS SAUCES | Una plácida tarde de domingo en familia terminó con una tragedia impensada. Un hombre de 44 años identificado como Adrián Icusa, que según trascendidos sería oriundo de la ciudad de Catriel pero radicado el Rincón, cayó al río Colorado por accidente cuando intentaba lavarse las manos y los brazos en la orilla.
El hombre habría perdido el equilibrio y en un segundo cayó al agua sin poder hacer pie y quedando a merced de la fuerte correntada.
El lugar donde ocurrió el hecho es conocido como «El Arbolito», un sector del Colorado donde el agua provoca un remanso pero que en épocas de deshielo trae la suficiente fuerza para arrastrar a una persona.
En medio del episodio que era observado por familiares del desaparecido y un grupo de amigos, dos de ellos se arrojaron al río para intentar rescatarlo, pero no lo lograron.
Uno de los amigos logró volver a la orilla mientras que el otro nadó hasta un pequeño islote, por lo que tuvo que ser rescatado por bomberos voluntarios.
La situación era de máxima desesperación, ya que quienes habían acompañado a Icusa reclamaban que alguien lo rescatara.
Las autoridades de emergencia llegaron minutos después de recibir el llamado de emergencia pero ya no había rastro del hombre.
Icusa trabaja en la empresa de servicios petroleros Skanska, por lo que en las últimas horas sus compañeros de actividad esperaban novedades del operativo de búsqueda.
Hasta ayer, la causa estaba caratulada como persona desaparecida, ya que la familia y allegados se afianzan a la idea de que el Icusa pudo haber emergido río abajo y aferrarse a los islotes que separan las provincias de Neuquén y Mendoza.
Personal de la unidad policial 35 y de bomberos de Rincón, trabajaban intensamente en la búsqueda pero sin novedades.
El ochenta por ciento de las personas ahogadas en Rincón de los Sauces, se bañaban, jugaban o estaban por algún motivo cerca del agua del río Colorado en El Arbolito. Este sitio es un improvisado balneario no habilitado, con pozones, piedras y raíces de viejos árboles, que quedan tapadas por el agua en temporadas estivales y son verdaderas trampas para las personas.
El lugar en apariencia tiene orillas playas pero a pocos centímetros de los bordes, hay barrancas ocultas que ponen es riesgo cualquier intento de ingresar al agua.