25 DE MAYO | Dos policías del puesto caminero de Puente Dique están involucrados en el caso. El abogado defensor Juan Carlos de la Vega (foto) sostuvo que los sacaron del medio porque «molestaban» y sugirió que la investigación debería apuntar más arriba en la jerarquía de la fuerza.
El abogado Juan Carlos De la Vega, defensor de uno de los dos policías acusados por el contrabando de carne en el puesto caminero de Puente Dique, en 25 de Mayo, sugirió que en el caso estarian involucrados otras autoridades policiales y que, en realidad, los sacaron del medio porque “molestaban” en el puesto de control. “Si yo fuera fiscal no creería que un cabo y un agente pueden manejar este tipo de delitos”, dijo.
De la Vega es el defensor de uno de los policías que fueron detenidos el 18 de diciembre del año pasado en el marco de un megaoperativo, en el cual cayeron también tres personas de Catriel y otros tres de 25 de Mayo, imputados de contrabandear carne a Rio Negro y Neuquén desde la provincia. Luego de unos días presos, fueron excarcelados en enero, aunque la investigación continúa. Están acusados, en principio, por tráfico ilegal de carne, asociación ilícita y cohecho activo (coimas), según la formalización que presentó el fiscal Alejandro Massó.
Se secuestraron tres camionetas Toyota Hilux, además de haberse decomisado una gran cantidad de carne. Durante dos meses se hicieron escuchas telefónicas que comprometen a los sospechosos. Entre los acusados, según informaron los medios de Catriel, están el dueño de un frigorífico y una carnicería en esa localidad, Ruperto Soto; y un comerciante de 25 de Mayo, Boris Barroso, además de los dos policías.
El abogado Juan Carlos De la Vega hizo declaraciones esta semana a Radio Municipal, de 25 de Mayo. En principio, consideró “un medida abusiva” la prisión preventiva que se dictó en primer término sobre los acusados, porque ya se habían hecho las capturas de los téléfonos y las escuchas en la investigación y, además, las penas previstas por los delito son “bajas”.
De los delitos que se le imputa a los sospechosos, el abogado consideró que, en el caso de los policías, “puede que sea más facil de comprobar” el incumplimiento de deberes de funcionario público y estimó que las figuras de coimas y asociación ilícita solo son supletorias. Estimó que “hay diligencias que echan por tierra la fuerte convicción que tenía el fiscal” sobre la autoría del hecho.
Su defendido -un policía de apellido Valdez- estuvo detenido en Santa Rosa y, dijo, lo encontró sorprendido porque “siendo policía se veía del otro lado”. “Él me contó que no tuvo nada que ver en esto, nunca tuvo relación ni conocimiento del paso ilegal de carne. Tampoco es como se dice, que se iban del lugar a otro determinado sector”, dijo.
“Es para reírse un poquito. Hay una persona que declaró, que denunció eso,y nada más que eso hay. Esa persona dice que le dijeron que se recibía dinero, habría que ver si lo dice en tribunales”, manifestó sobre la acusación de coimas. “La persona que declaró dijo que le dijeron que recibían dinero. Habría que ver si sabe cómo fue la situación, cómo estaba vestido, si realmente lo conoce la persona que le dijo que le dijeron, es un trabajo mío poder demostrar en tribunales que en realidad es mentira o por algún motivo quisieron sacar a estas dos personas”, añadió.
“Seguramente molestaban el puesto, o por algún otro motivo que yo presupongo. Quizás molestaban en el puesto justamente en una fecha en donde es normal y habitual el aumento de la venta de carne, entonces sacándolos es mucho más fácil, quizás hoy también hayan pasado carne y nadie se dio cuenta”, enfatizó.
El abogado admitió que la investigación del fiscal Masso “está bien llevada, hay escuchas telefónicas, mensajes de texto, yo he participado justamente de una de las pruebas relacionadas con la apertura de los teléfonos”. Pero deslizó una crítica: “Llama poderosamente la atención que, existiendo dos policías que estén detenidos, solamente a uno se le haya hecho allanamiento”.
Por otra parte, De la Vega sugirió que la investigación debería poner en foco personal policial de mayor jerarquía. “Yo no creo que una investigación de esta naturaleza, para jactarse de ser una buena investigación, deba terminar en un cabo primero y en un agente de policía que son los que estaban en el puente. Si uno es un buen fiscal, yo no creería que un cabo primero y un agente manejen ese tipo de delitos”.
“Me llama la atención que solo un cabo primero y un agente estén involucrados. Valdez obviamente quedó manchado por una sociedad que ya compró. Habría que ver si no lograron el objetivo que era sacarlo del puente”, insistió.
La imputación sobre los dos uniformados sospechados “quizás se basó en que ellos salían del lugar en donde tenían que estar, habría que ver por qué se iban de ese lugar. Obvio que lo sé, por cuestiones sanitarias. Entre otras cosas, no tienen baño”.