SAN CARLOS DE BARILOCHE | Tal como ocurrió más de una vez en los últimos meses, el Movimiento Evita tenía todo listo para comercializar una partida de pescado directo del productor y a precios reducidos, pero el operativo quedó cancelado porque la mercadería no superó los controles del municipio y fue secuestrada y destruida.
Los 4.000 kg de pescado y productos de mar habían llegado en un pequeño camión de la empresa Internacional de Congelados SA y en una inspección de rutina realizada el último martes el personal municipal constató que no tenía frío suficiente.
El Código Alimentario exige para la conservación de pescado una temperatura de -18°C y lo transportado se encontraba a sólo -5°C. El vehículo y su carga fueron «intervenidos» y trasladados hasta la dependencia municipal del barrio El Cóndor.
El juez de Faltas, Gustavo Contín, labró las actuaciones correspondientes y tras considerar que la mercadería no era apta para el consumo humano ni animal, ordenó su destrucción. La incineración se cumplió ayer en la planta del frigorífico Arroyo.
El municipio aclaró que no se trataba de un cargamento de pescado de los que llegan de Nación para abastecer el mercado comunitario inaugurado por la intendente Martini hace un par de semanas, sino que correspondía a un programa especial administrado por el Movimiento Evita.
El propio ME había anunciado el cronograma de venta de pescado «a precio popular » en distintos barrios para el miércoles y jueves, pero luego lo suspendió, sin comunicar las razones.
El jefe de Inspección General, Rubén Guzmán, dijo que el transporte con pescado estaba sobrecargado y que tuvo deficiencias en su cadena de frío.
En declaraciones al portal «DeBariloche» aseguró también que los inspectores del municipio observaron que los contenedores no tenían los precintos originales.