Integrantes de la comunidad mapuche de Colonia 25 de Mayo criticaron las declaraciones del presidente del Ente Provincial del Río Colorado, Jorge Dosio, y expresaron que el EPRC está concentrado en un negocio inmobiliario, dejando paisanos en la calle y despojando de identidad a la provincia.
Advirtieron que la comunidad mapuche va por los títulos de las tierras, y que si el poder político se empecina en ignorar el reclamo, habrá un final impredecible «que será muy caro para todos».
«Personalmente estoy conversando con observadores de la ONU –adonde formalizamos la denuncia- y también estamos charlando con dirigentes de distintos pueblos originarios de Argentina, que nos van a acompañar en el reclamo. Los pueblos originarios, nunca vamos a andar de rodillas. ¿Quieren saber si estamos unidos? Ahora se van a enterar. Este señor (en alusión a Dosio) habla de plan estratégico. Parece que el plan estratégico es venderle a un privado, que este mueva máquinas y se vea actividad, para tapar lo que el ente no hace», dijo el Lonko de la Comunidad Mapuche del Oeste Pampeano, Flavio Zúñiga.
«En lugar de intentar ensuciar a gente honesta tratándolos de especuladores, Dosio debiera estar enfrascado en dar explicaciones sobre las denuncias de vaciamiento del Ente, que dicen que ha perdido desde 1984 el 80 por ciento de su planta, con talleres desmantelados», agregaron los integrantes de la comunidad mapuche.
«El doctor Jorge Dosio está vendiendo humo para esconder la realidad. El Ente vendió una chacra por dos mangos a gente de una petrolera en la que había una chenke (cementerio indígena) con cientos de cuerpos, lugar que nunca preservaron. Allí plantaron perales y hoy está todo abandonado. Dosio sabe que tiene que dar explicaciones, y al más puro estilo leguleyo, siembra confusión para tratar de poner paños fríos en cosas en las que tiene directa responsabilidad», expresó Rubén Larrondo, werken de la comunidad. Y agregó: «Si como él dice hubo casos de extorsión, debiera denunciarlo, es su obligación; caso contrario es cómplice y por extensión, responsable de la potencial extorsión de la que habla».
Más adelante el dirigente indígena expresó: «si (Jorge Dosio) se hubiera dedicado a leer el material que le dejamos -es decir, la copia de lo que le presentamos al gobernador, donde está todo el marco legal de los derechos de los pueblos originarios y la jurisprudencia correspondiente- tal vez hubiera hecho silencio. Pero o no lo leyó, o no entendió nada. Pero si se dedicó a descalificar a gente que vivió en el campo toda la vida, tildándolos de oportunistas que buscan cobrar servidumbres. Le damos un consejo: doctor Dosio, los libros no muerden, la ignorancia tiene cura con un buen tratamiento de biblioteca. Como hombre del derecho debiera dar explicaciones porque el Ente que preside cobra servidumbres y reparte migajas a los paisanos, cuando ese es un derecho del que trabaja la tierra, sea puestero o indígena; sin embargo opta por quedarse una tajada, a contrapelo de las normas vigentes riéndose de la gente del campo, tanto de puesteros como de los mapuche».
Larrondo agregó: «Se lo dijimos a él (por Dosio) y a su subalterno, el ingeniero Mario Porrino: parece que el Ente planteó un proyecto de desarrollo en una oficina mirando un mapa, sin pensar que dentro de ese espacio, vivía gente. Cuando uno dice La Pampa, el primer símbolo que aparece es el hombre de campo. Es decir que el puestero, el paisano, es la identidad de esta provincia. A Dosio, con la mejor actitud neoliberal, la identidad no le significa nada, sólo vale que se produzca, sin importar a qué bolsillos va el beneficio de esa producción».
«Dosio está gestando un Frankestein sin identidad –el futuro pampeano fruto de su acción- sin patria, sin sentido de pertenencia, sólo parece importarle hacer caja. Pero que vaya sabiendo que lo que los mapuche encarnamos, no es un intento de sacar un beneficio, sino que vamos por los títulos de las tierras como corresponde por derecho ancestral. Este continuador del genocida Roca que vaya teniendo en cuenta que sobrevivimos a la espada española, al fusil genocida de la campaña al desierto y seguimos en pie. Si verdaderamente vivimos en democracia, si verdaderamente nuestros gobernantes velan por el cumplimiento de las leyes, nuestros hermanos van a tener el título de sus tierras. Si en cambio el gobierno hace caso omiso de las normas, esto tiene un final abierto donde seguramente el resultado no será gratis para nadie», sentenció el werken mapuche.
Fuente: Diario Textual
fUENTE: dIARIO teXTUA