Un equipo de la carrera de Psicología de la Universidad Nacional del Comahue realizó el primer estudio en la zona. El 70% de los consultados dijo tener problemas de memoria. Las estadísticas servirán para elaborar estrategias.
Por Luis Leiva
Enfermedades como el Alzheimer no aparecen de un día para el otro. Son patologías que se pueden detectar de manera muy temprana y con métodos eficaces se puede hacer un abordaje rápido que pueda contener el avance de la enfermedad.
Un muestreo realizado por primera vez en las provincias de Río Negro y Neuquén arrojó que casi el 70% de las personas consultadas (mayores de 50 años) tiene algún problema de memoria. Un 49,6% de ellos asegura que estas fallas constituyen un inconveniente y un 42,9% sostuvo que son detectadas por alguna persona que se encuentra en su entorno.
Entre las conclusiones del estudio se destaca que por lo menos el 23% de los encuestados tiene mayor posibilidad de desarrollar una demencia en los próximos años.
El trabajo concluyó a fines del año pasado y se propuso como inicio de una línea de investigación desde la Cátedra de Neuropsicología de la carrera de Psicología de la Universidad Nacional del Comahue y como continuidad de investigaciones de la cátedra que lleva el mismo nombre y que se dicta en la Facultad de Psicología de la Universidad Nacional de Córdoba.
Durante ese periodo 2012-2014 se propuso mediante el empleo de pruebas neuropsicológicas, evaluar a adultos mayores de 50 años para detectar Deterioro Cognitivo Leve (DCL) y establecer la frecuencia en nuestra región.
El Deterioro Cognitivo Leve (DCL) es un diagnóstico intermedio entre el declive normal y demencias como el Alzheimer. Es una entidad clínica desarrollada con el fin de predecir la evolución hacia esa enfermedad o bien otro tipo de demencia.
Los detalles
La muestra estuvo conformada por un total de 113 personas que asistieron voluntariamente a la evaluación. Se les administró un cuestionario sociodemográfico y una selección de instrumentos neuropsicológicos.
Los especialistas aclararon que los resultados están en consonancia con los realizados en otros puntos del país y sirven como base para ir monitoreando el avance de este tipo de patologías en esta región del Comahue.
De los encuestados, el 77% eran mujeres. El promedio de edad fue de 63,34 años y con nivel instrucción que rondaba los 13,4 años de escolaridad.
Pero además de detallar sus actividades físicas y cotidianas, las personas consultadas también hablaron sobre su salud. Y entre los principales resultados se determinó que el 69.9% reconoció tener algún problema de memoria. Y casi la mitad de ellos admitió que a esta altura de sus vidas resulta «un problema».
Por su parte, un 42,9% afirmó que las mismas son advertidas por las personas que los rodean.
El 31,9%, indicó tener antecedentes familiares y referenciaron el Alzheimer como una de ellas.
Vinculado a la realización de actividad física 73,5 % dijo que realiza alguna en su vida cotidiana, en tanto 23.9 % no lleva delante ninguna.
En hábitos de lectura el 42,5 % reconoció leer revistas o libros en forma frecuente, en tanto que el 35.4 % refirió hacerlo de manera ocasional. Más del 22 por ciento de los consultados señaló no mantener frecuencia de lectura.
El docente de la carrera de Psicología y uno de los referentes de la investigación, Alfredo Ruiz, destacó que este trabajo sirve como base para comenzar a trabajar con números reales de la región ya que hasta el momento se analizaban estadísticas que eran representativas de otras zonas. «Nos va a permitir, además, contribuir en la difusión de una temática interesante del deterioro cognitivo y las demencias, Y e los factores protectores y de riesgo en lo que sería el envejecimiento normal y el patológico», sostuvo.
En relación a las estadísticas expresó que son similares a las de otras regiones aunque aclaró que se puede detectar un porcentaje de Deterioro Cognitivo Leve pero que no todos los casos avanzan efectivamente hacia la demencia.
«Los problemas de memoria hay que chequearlos objetivamente con pruebas neuropsicológicas o bien determinar si es una presunción. Hay factores psicológicos como la depresión ansiedad y estrés que pueden influir», detalló el especialista quien adelantó que este año avanzarán con una nueva investigación en esta materia.
Mayor riesgo…
Mediante un análisis se exploró las variables de la investigación y se logro establecer entre otro puntos que: el género y la educación implican una mayor probabilidad de tener deterioro cognitivo.
El género masculino revela tener una probabilidad seis veces mayor.
«En la población evaluada, podemos explicar nuestro hallazgo en función de que el género masculino que consulta por curiosidad, está más comprometido en sus funciones cognitivas que la mujer. Esto se observa generalmente cuando es el varón que menos acude a las consultas, pero cuando lo hace suele tener mayor probabilidad de problemas de salud, en relación a las mujeres», explica el informe.
El nivel de instrucción bajo tiene 1,5 veces mayor probabilidad en relación al alto nivel. Se lo asocia con mayor probabilidad de deterioro cognitivo.
Qué hacer frente al problema
Es importante realizar un estudio neuropsicológico de la atención, memoria, fluidez verbal y ejecutivas, como también una evaluación conductual del desempeño en tareas de la vida diaria y del estado emocional, resulta ser la combinación de mayor sensibilidad. Estudios de neuroimágenes funcionales como el Spect, estructurales como la Resonancia magnética nuclear y otros de laboratorio son útiles, aunque sus hallazgos suelen ser observados recién en etapas más avanzadas.
Acciones terapéuticas para el deterioro cognitivo leve
- Estimulación de la atención y memoria con sentido ecológico (en la vida diaria), con adquisición de estrategias compensadoras de los olvidos l rendimiento.
- Prevenir la depresión, que en muchas ocasiones es la antesala de una demencia.
- La relajación, meditación y autocontrol favorecen el manejo de la ansiedad (inquietud) y de las situaciones problema.
- A nivel farmacológico, distintos medicamentos resultan beneficiosos. Un médico neurólogo o psiquiatra especializado sabrá indicar lo conveniente a la problemática en curso.
Un buen programa terapéutico de estimulación cognitiva, además de la ejercitación para el desarrollo de nuevas estrategias de almacenamiento y evocación, requiere de una tarea psicológica tendiente a resignificar el problema de la memoria y la vejez, de modo que las personas logran una expectativa de mayor autoeficacia.
Nunca es tarde para empezar
Entre las actividades más recomendadas cómo hábitos protectores para personas mayores de 50 años se encuentra:
- iniciar nuevos estudios, aprendizajes de idiomas, de oficios, de instrumentos musicales, teatro y actividades lúdicas que implique el uso de estrategias variadas (ajedrez, bridge, etc.).
- También se recomiendan actividades de uso del lenguaje (lectura, escritura, conversación, juego de palabras, etc), ser participativo y opinar con información y lógica sobre diversos temas.
- Si lee un libro, ve una película, obra de teatro o escucha música es muy bueno, siempre y cuando comparta o intercambie con otros sus impresiones.
- Al acostarse, destinar unos minutos a repasar lo que se hizo durante el día (mientras más detalle mejor).
Factores de riesgo
La literatura científica indica que entre los factores de riesgo que no tienen un valor predictivo determinante, pero que aumentan la probabilidad de pasar de una memoria normal hacia deterioro cognitivo o patologías tales como las demencias, se encuentran:
- la edad;
- bajo nivel de exposición a situaciones de aprendizaje;
- elevados niveles de estrés crónico;
- problemas de riesgo vascular (hipertensión, colesterol);
- consumo crónico de drogas que afectan las funciones cognitivas;
- antecedentes familiares de Alzheimer;
- antecedente familiar de síndrome de Down;
- presencia elevada de la apolipoproteína E4 y D (cromosoma 19).
¿Cómo protegerse?
Entre los factores protectores del deterioro cognitivo leve y la demencia se reconocen:
- frecuente participación de situaciones de aprendizaje;
- habilidades con el lenguaje
- bajo nivel de estrés;
- rstimulación cognitiva cotidiana;
- relaciones familiares o socioafectivas significativas;
- personalidad o actitud positiva;
- ejercicio físico regular.
¿Qué es el Alzheimer?
Enfermedad mental progresiva que se caracteriza por una degeneración de las células nerviosas del cerebro y una disminución de la masa cerebral; las manifestaciones básicas son la pérdida de memoria, la desorientación temporal y espacial y el deterioro intelectual y personal.
Luis Leiva
luisleiva@rionegro.com.ar