Serán previos a los cursos obligatorios que regirán en Río Negro
VIEDMA | Los controladores de locales nocturnos y espectáculos públicos, comúnmente llamados «patovicas», deberán ser sometidos a revisión psicológica antes de comenzar los cursos obligatorios que les permitirán obtener la licencia para actuar como tal. Ese estudio es requisito indispensable para que se anoten en las capacitaciones.
Para ello, se firmó un convenio entre el secretario de Trabajo, Luis Troncoso, y el jefe de la Policía, Fabián Gatti. El acto se concretó en el organismo laboral con la presencia de la coordinadora del programa, Candela Sequeiros.
El acuerdo tiene como fin «lograr el efectivo aprovechamiento de los recursos existentes en ambas instituciones, en procura del desarrollo humano y socio económico de la provincia» dirigida fundamentalmente al área de formación y capacitación.
La firma de este convenio se originó en la necesidad del cumplimiento a la normativa legal que rige la materia –ley 4351 en concordancia con leyes nacionales– normativa que viene a dar respuesta a una importante demanda social, obligando a la realización de una evaluación psicológica habilitante para poder desempeñarse como controladores de admisión y permanencia en establecimientos nocturnos.
Por ello, la Jefatura de Policía se compromete a la ejecución de estas evaluaciones a través de sus equipos técnicos e informar a la Secretaría de Trabajo los resultados, dándose así continuidad a los restantes requisitos de ingreso.
Troncoso dijo «que es auspicioso que dos instituciones de la provincia coincidan y articulen acciones que en definitiva redundarán en beneficios a los rionegrinos».
Los cursos se concretarán en el ámbito del Instituto Provincial de la Administración Pública (IPAP) que lanzó el plan de formación profesional de controlador/a y preventor/a con orientación en la protección integral del público en general.
Está avalado por la ley provincial 4351, y es parte de la reorientación del trabajo de quienes ejercen el rol de porteros en los locales nocturnos. Los cursos se extenderán por espacio de seis meses, y si bien la norma otorga un plazo de cinco años para que los «patovicas» se ajusten a la norma, desde julio del año próximo comenzarán los controles de habilitaciones, de acuerdo con el cronograma establecido por la coordinación.
En el marco de esta norma también se prevé la creación de un registro público provincial de personal de control y admisión de permanencia como condición de habilitación de esta actividad en los lugares donde se requiera.
Los contenidos mínimos de la formación incluyen materias relacionadas con sociología, mediación del conflicto, derechos humanos, técnica de neutralización de agresiones físicas, seguridad contra siniestros, primeros auxilios, ética, trabajo y responsabilidad del Estado.
Fuente: rionegro.com.ar