“En estos momentos, en una situación tan difícil en lo social y económico, deberíamos tranquilizarnos y convocar al diálogo social, poniendo cuatro o cinco puntos sobre la mesa”, dijo en declaraciones radiales.
El titular del sindicato de Petróleo y Gas Privado de Río Negro, Neuquén y La Pampa, Guillermo Pereyra, consideró “es lamentable y sin sentido utilizar la cadena nacional para atacar a los trabajadores y a los empresarios”, al hacer referencia a las críticas que la presidenta Cristina Kirchner realizó el martes públicamente a los gremialistas que reclaman aumentos de salarios y a los empresarios que suben precios.
El también senador nacional y secretario adjunto de la CGT opositora que lidera Hugo Moyano, Guillermo Pereyra, añadió en declaraciones a la radio La 2×4/FM 92.7, que “en el discurso no quedó nadie en pie, nos juntó a todos. Confrontando no se arreglan las cosas; hay que bajar los decibeles y sentarse a conversar”.
En este marco, el titular del Sindicato de Petróleo y Gas Privado de Río Negro, Neuquén y La Pampa, puntualizó que “en estos momentos, en una situación tan difícil en lo social y económico, deberíamos tranquilizarnos y convocar al diálogo social, poniendo cuatro o cinco puntos sobre la mesa. Hay que convocar sin ningún tipo de exclusión: a los trabajadores, a la Iglesia, a los empresarios y a todos los sectores que componen la sociedad para empezar a encaminar al país, en medio de la hiperinflación que estamos viviendo y con la caída de las reservas”.
En esa dirección, afirmó: “Los trabajadores muy pocas veces han tenido tanta prudencia como ahora frente a una situación tan difícil. Por eso están reclamando urgentemente la convocatoria a paritarias ante la caída real del salario. Todavía no estamos en condiciones de discutirlas porque no podemos hipotecar el salario por un año. No creo que ningún gremio cierre por menos del 30 por ciento”.
Al ser consultado sobre la posibilidad de reunificación de las centrales obreras, el senador nacional por el Movimiento Popular Neuquino (MPN) manifestó que “puede haber una organización sindical muy alineada con el Gobierno (por la CGT oficialista que encabeza Antonio Caló), pero también le tiene que dar una respuesta a los trabajadores. Los alineamientos no son prudentes. Igual, es necesario que todos los dirigentes nos juntemos y empecemos a transitar el camino de la unidad, ya que los reclamos son los mismos. Ideológicamente estamos todos en la misma vereda. No encuentro motivos para estar separados”.
Finalmente, el neuquino precisó que el gremio que encabeza arregló “una suma fija por tres meses de 4.000 pesos mensuales, no remunerativos. Esto llegaría directamente al bolsillo de los trabajadores. Y en el mes de marzo nos vamos a sentar a discutir todas las paritarias pero dejamos una clausula abierta que cualquiera de las partes se puede convocar ante circunstancias especiales. Es decir, serán permanentes y libres”. (El Parlamentario)
P. Rincón