El senador ya lo blanqueó ante representantes del gobierno central, pero no lo da por cerrado. Soria dijo que todavía no tiene decidido qué hará y pidió hasta la Fiesta de la Manzana.
En Casa Rosada, el senador Miguel Pichetto transparentó su pretensión de que la legisladora Ana Piccinini lo acompañe en la fórmula gubernamental. Se lo planteó al operador kirchnerista, Juan Carlos Mazzón, y al intendente roquense Martín Soria. Fue otro avance para consolidar su postulación, a pesar que ayer el jefe comunal relativizó un acuerdo en ese cónclave para otorgar su respaldo a la candidatura de Pichetto.
Los tres volvieron a cruzarse en la reunión del Consejo Nacional del PJ. Allí, en un brevísimo aparte, el presidente de ese cuerpo, el jujeño Eduardo Fellner le ratificó a Pichetto que autoridades partidarias, posiblemente él mismo, Mazzón y Jorge Capitanich llegarán a Río Negro para participar del Congreso provincial, acordado en el encuentro del miércoles. Otro convite. El senador y Soria invitaron al precandidato a la presidencia Daniel Scioli para que concurra a los festejos centrales de la Fiesta de la Manzana, el próximo 7 de febrero.
El encuentro de Mazzón, Pichetto y Soria generó especulaciones. Ayer, el roquense desestimó la existencia de un acuerdo para apoyar a Pichetto en el 2015 y postergar sus aspiraciones hasta el 2019. «No se habló de ninguna candidatura», manifestó en un comunicado. Resaltó la coincidencia para la «normalización del partido», la realización del Congreso del PJ y requirió «coraje para enfrentar a quienes desde adentro del partido» están al «servicio de un adversario». Valoró al Frente Grande, que «con más coraje, expulsó a Weretilneck por traidor» y recordó como el «Gringo Soria echó a los traidores de ocasión.»
Soria, realmente, no habló de candidaturas y silenció sus pretensiones. En cambio, Pichetto sí habló de la suya y reclamó que el roquense transparente su determinación. El intendente aludió que quiere esperar hasta después de la Fiesta de la Manzana.
Esa solicitud de tiempo genera dispares interpretaciones en el pichettismo.
A pesar de esa indefinición, Pichetto avanzó con su estrategia y blanqueó su compañera de formula. «He pensado en integrar a una extrapartidaria, la legisladora Piccinini. Me suma varios puntos», afirmó el senador. «Es una buena candidata», dijo, mientras agregó que Carlos Soria fue quien la sumó al Frente para la Victoria, cubriéndose así de cualquier embestida del joven Soria. No ocurrió, salvo una alusión donde diferenció la exposición e imagen de Piccinini -por entonces, Defensora del Pueblo- con el presente.
Más allá de su propuesta de Piccinini, Pichetto priorizó un acuerdo con Soria y por eso le reiteró que la candidatura a vice está a su disposición por si quiere sumar a alguien de Roca. El roquense no respondió.
El intendente quiere más tiempo para resolver candidaturas. Antes, insiste en la concreción del Congreso y eventualmente, sancionar a los peronistas ligados a Weretilneck. En Casa Rosada, Mazzón medió entre una simbólica acción partidaria de Pichetto y la contundente expulsión de Soria, planteándose una eventual suspensión de las afiliaciones.
El Congreso partidario será en la segunda quincena de febrero y el lugar no está acordado pero podría darse en alguna localidad de la Línea Sur o en El Bolsón. Se respetará el temario original.