La cochería responsable del servicio funerario «se olvidó de avisar». Tuvieron que cavar ellos mismos la fosa.
La indignación y el dolor hicieron estallar las redes sociales, después que familiares de una persona recientemente fallecida llegaran al cementerio y se encontraran con el portón cerrado.
Fue en la tarde del domingo, e inmediatamente después del acontecimiento, los insultos y los descargos en contra de la municipalidad coparon los mensajes en Facebook.
Ante lo sucedido, Cristina Toledano, al frente del sector de la municipalidad que atiende el cementerio, informó que no había sido responsabilidad del municipio, sino de la cochería que tiene el servicio funerario, que «se olvidó de avisar». Asimismo, también explicó que «los fines de semana son los bomberos quienes se hacen cargo de los servicios funerarios».
Entre tanto, desde la cochería se expidieron al respecto y fue Claudia Magnenat quien asumió que: «El error fue mío, lo acepto, fue un error humano y las razones de por qué se me pasó avisar no vienen al caso», dijo consternada por «el tole tole que se armó».
Por su parte, uno de los hijos del hombre fallecido -que trabaja en el cementerio- dijo conocer cómo es el procedimiento y que «la familia en ningún momento responsabilizó al municipio». Fueron los mismos allegados quienes consiguieron una llave del ingreso y con palas comenzaron a cavar la fosa.
Desde Bomberos aseguraron que llegaron apenas les avisaron, «quince minutos después de que llegara el acompañamiento»; pero para entonces la familia ya había empezado a realizar la tarea.
No obstante, hay que destacar que desde el mismo ceno familiar o allegados al fallecido, fue de donde se desprendió la polémica acusando al municipio por las redes sociales.