Los gremios petroleros de la Patagonia definieron reunirse con dos reclamos concretos y la amenaza de parar 55 mil operarios. Pretenden un nuevo aumento salarial antes de fin de año y además insistirán con la modificación de la base no imponible del Impuesto a las Ganancias.
El titular de Petroleros Privados de Río Negro, Neuquén y La Pampa, Guillermo Pereyra, recibió ayer en su despacho del senado a su par de Chubut, Jorge Avila, y hoy esperan repetir el encuentro con Claudio Vidal de Santa Cruz. Por lo pronto resolvieron un plenario intersindical para el próximo 21 de este mes, en Comodoro Rivadavia, al que esperan arribar con las comisiones directivas y unos 600 delegados.
«Este tema lo hemos planteado en reiteradas oportunidades y nunca tuvimos respuestas. Pero no puede seguir así. Dicen que los petroleros ganan mucho pero no es así. El sueldo es similar a cualquier otro, el resto -que pueden llegar hasta los 60 mil pesos- se compone por horas extras, viajes, viáticos y otros adicionales», explicó Pereyra.
La intención de la nueva intentona de los gremios para rechazar el Impuesto a las Ganancias busca que se modifique la base no imponible con el que se calcula la retención para el sector. Pretenden que la alícuota se aplique al salario neto sin adicionales y otros agregados.