La delegación llegó junto a representantes de Electroingeniería y CPC.
Neuquén | De la mano de Electroingeniería y CPC, una delegación china desembarcó ayer en la capital neuquina para analizar la posibilidad de invertir en la construcción de la presa Chihuido I, largamente postergada en esta provincia.
El grupo es el mismo que termina de asegurarse la construcción de las centrales hidroeléctricas Néstor Kirchner y Jorge Cepernic en Santa Cruz donde desplazaron al empresario kirchnerista Lázaro Báez.
La reunión central se hizo en Casa de Gobierno ayer al mediodía y el anfitrión fue Elías «Gringo» Sapag quien al ser consultado por «Río Negro» trató de quitarle importancia al encuentro.
«Esto es preliminar, está muy verde todavía, pero sí, es cierto, nos reunimos con el grupo», afirmó Elías Sapag al ser consultado por este diario.
«Nos tienen que explicar qué quieren, qué avales necesitan y qué otros papeles», agregó el hermano del gobernador neuquino.
Explicó que la semana que viene en Buenos Aires habrá un segundo encuentro en el que se definirá una agenda de trabajo, estableciéndose los días «clave» dentro de un plan que definirá si el grupo Gezouha –que reemplazará en la arquitectura original la brasileña OAS– asume el compromiso de construir la presa.
En la delegación de una decena de personas estuvieron además representantes del Banco de Desarrollo de China, un desarrollador israelí, un potencial inversor chino, y representantes de Rovella Carranza y Electroingeniería.
El grupo de empresas encabezado por Electroingeniería mantiene la preadjudicación de la obra que preveía una inversión total de 1.526 millones de dólares.
Para el gobierno neuquino la experiencia en el sur del país puede servir de modelo aunque en su parte embrionaria los proyectos de Santa Cruz habían tomado a Chihuido como ejemplo, admitió Elías Sapag. Y enseguida pidió «tener en claro que se trata de un primer paso» en un tema que «muchas veces parecía que arrancaba» y siempre sufrió demoras. Es precisamente por la no construcción de Chihuido que el gobernador Jorge Sapag suele recibir muchas críticas, internas y de la oposición.
En Santa Cruz, si todo marcha de acuerdo con el cronograma previsto por el gobierno nacional la obra se adjudicará el 22 de agosto.
El proceso, según habían consignado algunos medios porteños, estuvo a punto de ser impugnada por el grupo que lidera Lázaro Báez. Se deslizó que podría acudir a la justicia pero esto no ocurrió. Báez se presentó a través de Austral Construcciones junto a Sinohydro, Esuco, Chediack y la constructora Iecsa, de Ángelo Calcaterra, sobrino de Franco Macri.
Fuente: rionegro.com.ar