Temas Petrobras, PASO y Vicegobernador deberán esperar
VIEDMA | No habrá hoy sesión de la Legislatura, dejando pendiente la pretensión gubernamental de que el legislador oficialista Pedro Pesatti asuma como vicegobernador. También quedaron postergados los tratamientos del acuerdo con Petrobras y el proyecto de las PASO.
El gobernador Alberto Weretilneck minimizó anoche el conflicto, mostrándose confiado en que la situación lo favorecerá.
El presidente de la Legislatura, Ariel Rivero, suspendió ayer el encuentro de Labor Parlamentaria y el llamado a sesión para hoy, cuyo temario no estaba resuelto y preveía fijarse a partir de la mayoría que lograse cada sector. En ese sentido, el titular del Poder postergó la reunión cuando advirtió que no tenía los votos suficientes para fijar su orden de prioridades, puntualmente postergar la propuesta del gobernador Weretilneck -según el artículo 180 de la Constitución Provincial- para designar a Pesatti como vice, desplazando al propio Rivero.
Por la mañana, en declaraciones radiales, Rivero aseguró que se realizaría la sesión de hoy, con la inclusión del contrato con Petrobras -a pesar de que no tenía dictamen de todas las comisiones- y postergando el pedido de Weretilneck en favor de Pesatti, porque entendía que el STJ estaba abocado a la cuestión. Aludió a la resolución donde ese cuerpo judicial, que aceptó intervenir en el mandamus por la aplicación del Artículo 180 de la CP y, en principio, solicitó información al Ejecutivo y la Legislatura.
Al mediodía, el presidente resolvió la suspensión después de que el titular del bloque radical, Bautista Mendioroz, le adelantara que el mandato de su bancada exigía tratar el Artículo 180 de la CP. Estos apoyos permitirían al oficialismo que se impusiera la designación de Pesatti, entonces Rivero optó por la postergación de Labor y de la misma sesión. Su despacho lo merodeaban los legisladores Alejandro Marinao, Ana Piccinini, Silvia Horne y Martín Doñate.
Rápidamente, su secretario legislativo, Rodolfo Cufre, redactó notificaciones para los presidentes de bloques e integrantes de Labor. Mendioroz casi se cruzó con sus pares radicales Adrián Casadei y Marta Milesi, alineados a la estrategia de Weretilneck. Ambos llegaron al sexto piso para participar de Labor y supervisar a Mendioroz. Cufre salió y les informó del levantamiento del cónclave y se fueron masticando bronca.
El diputado Claudio Lueiro arribó, pero rápidamente se fue cuando se enteró de la novedad. En su retirada, el peperreista se encontró con Pesatti y Tania Lastra, que llegaban con planes de resistencia. Lo acompañaban abogados y una escribana. Pretendían formalizar que Rivero se había excedido en sus facultades al disponer solo el aplazamiento del encuentro parlamentario. Al final, los oficialistas -vía llamados de Casa de Gobierno- fueron convencidos de que no había que forzar ninguna decisión.
Tampoco faltaron los contactos. Existió un diálogo telefónico entre Piccinini y el ministro Ricardo Arroyo. Ambos compartieron la búsqueda de encauzar el conflicto político-institucional planteado frente a riesgos mayores. No prosperó frente a la disparidad de objetivos. El funcionario requería el cumplimiento legislativo del mandato de Weretilneck en favor de Pesatti, mientras la parlamentaria entendía que esa situación complicaría más la situación y, en cambio, alentaba una reunión del gobernador con el senador.
Weretilneck siguió el proceso desde Casa de Gobierno, acompañado por Arroyo, el secretario General, Matías Rulli, el legislador Facundo López, y los secretarios Elbi y Nelson Cides. A media mañana presidió la entrega de escrituras en Desarrollo Social del municipio de Viedma, con el intendente radical José Luis Foulkes. Por la tarde viajó a Roca y anoche regresó a la capital, para seguir de cerca el avance de la situación legislativa.